Si como yo sois fieles seguidores de la PC Master Race seguro que estáis acostumbrados a jugar sentados en vuestro escritorio, en una silla que muchas veces no es todo lo cómoda que nos gustaría. Si hay algo que los jugadores de PC podemos envidiar de los consoleros es la facilidad para poder jugar en cualquier parte de la casa, sentados en un sofá y, ahora que el frío aprieta, tapados con una manta hasta las cejas. Y aquí es cuando llega Steam para salvarnos, gracias a una característica llamada retransmisión en casa, que nos permite jugar a cualquier título instalado en nuestro ordenador desde otro dispositivo Windows, Mac o Linux. Además, Steam pone a nuestra disposición un pequeño aparato específicamente hecho para esto por unos 55€, el Steam Link.

Configurarlo es tan sencillo como instalar el cliente de Steam en el dispositivo que se utilizará como receptor e iniciar sesión con la misma cuenta que tenemos en nuestro ordenador principal. Sobra decir que es requisito indispensable que ambos estén conectados a la misma red para que la conexión pueda realizarse. Además, como es lógico, deberemos asegurarnos que la conexión Wifi sea lo mejor posible para obtener una buena experiencia sin cortes ni retrasos. Una vez todo listo, accedemos a la biblioteca de Steam desde el dispositivo receptor y nos aparecerá automáticamente la opción retransmitir en lugar de jugar en los juegos instalados. Ahora solo queda conectar nuestro mando para completar la experiencia. ¡Ya no hay excusas para unirse a los peceros!