La instalación del router inalámbrico es una de las tareas más importantes si queremos tener una buena conexión, pero por desgracia suele ser algo que se hace en la mayoría de casos sin prestarle demasiada atención. Ya sea por desconocimiento de las mejores condiciones en las que colocar nuestro router o porque la estructura de la casa no permite margen de maniobra, lo cierto es que no es raro tener mala cobertura en zonas de la casa que están un poco alejadas del emisor WiFi. Esto podemos solucionarlo con repetidores o PLC, de los que ya hablamos en su momento, pero suelen ser opciones que nos obligarán a gastar dinero. Así que, antes de meternos en opciones más complejas, podemos intentar algo muy sencillo y que puede ayudarnos a mejorar la cobertura y velocidad de conexión de forma significativa: cambiar el canal de nuestra conexión.

¿Cual es el canal óptimo?

Empezaremos con un poco de teoría. La conexión WiFi puede transmitirse en 14 canales distintos, que se corresponden con unas frecuencias determinadas. Si el canal en el que estamos trabajando con nuestra conexión está saturado por otras redes será más complicado transmitir los datos y la conexión será más inestable. Por tanto, nuestro objetivo será averiguar cual es el canal óptimo y modificar la configuración del router para que transmita por dicho canal.

wifichannels

Canales WiFi y sus frecuencias correspondientes. Fuente

Y esto lo podemos hacer gracias a aplicaciones como WiFi Analyzer, disponible para dispositivos Android y Windows. Su uso es tan sencillo como abrirla y observar la gráfica con las conexiones activas en la zona donde estamos situados. Además, si cambiamos de vista podemos ver el canal óptimo al que deberemos cambiar. Lo mejor es darse una vuelta por toda la casa, sobre todo por las zonas más alejadas donde estemos teniendo problemas de cobertura, y ver qué canal es el recomendado. Eso sí, tened en cuenta que el canal 14 no es compatible con todos los dispositivos, ni todos los routers están preparados para emitir en dicha frecuencia, por lo que aunque es el más recomendable en cuanto a estabilidad, en la mayoría de casos no será posible seleccionarlo.

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Cambiar la configuración del router

Ahora sólo nos queda entrar en la configuración de nuestro router y buscar la configuración de la conexión inalámbrica (no voy a explicar en este artículo como entrar en vuestro router porque podría hacerse interminable). Seleccionamos el canal recomendado y guardamos los cambios. Con esto ya lo tenemos todo listo, no hace falta volver a configurar los dispositivos conectados ni realizar ningún cambio más. Si el canal en el que estábamos trabajando anteriormente estaba saturado y lo hemos cambiado a uno con menos conexiones deberíamos notar una mejora que variará en cada caso. Si no hemos tenido suerte, puede que nos quedemos como estábamos y no tengamos más remedio que optar por otras soluciones menos económicas. ¿Os ha servido a vosotros? Si tenéis cualquier duda o sugerencia no olvidéis dejárnoslo en los comentarios.